miércoles, 25 de febrero de 2015

Pastel de Maíz con Queso



En un pequeño homenaje culinario a México, su gastronomía y su cultura hoy proponemos otra receta con choclo (o elote) y harina de maíz. Releyendo hace poco algunos trabajos acerca de los tópicos de Octavio Paz (cuya obra literaria es una joya inmortal desde México  para el mundo), encontré entre sus referencias la mitología de las antiguas civilizaciones mexicanas, principalmente en lo que atañe al ciclo de Quetzalcóatl, una manifestación del dios del maíz en sus orígenes. De acuerdo con el corpus mitológico mesoamericano, los dioses crearon del maíz al primer hombre y a la primera mujer. Tal es la importancia que el maíz tenía dentro de la cultura de las civilizaciones del México Precolombino, cuyas redes comerciales (de larga distancia) posibilitaron su distribución a distintas zonas de Latinoamérica. Más allá de las raíces y de sus cruces con la mitología y la literatura, el harina de maíz es apta para celíacos por carecer de gluten, aporta hidratos de carbono, minerales (magnesio, fósforo, hierro, selenio y zinc), vitaminas A,B y E, tiamina, carotenos, ácido fólico y fibras. Y si hablamos de sabor, podemos definirla como  gustosa y suavemente texturada. Ya hay tantos cruces que tenemos prácticamente un vórtice energético, sin por ello poder definir éste plato como un "chakra", pero prepararlo es extremadamente sencillo y nutritivo, aunque algunos signifique y connoten muchos otros campos de acción, como la historia, las letras, la mitología, las raíces, los grandes hombres, escritores y filósofos:

Pastel de Maíz con Queso

Ingredientes

2 tazas de choclo desgranado, 2 tazas de tomates picados, 1 morrón, 1 y 1/2 taza de harina de maíz, 1 cucharada de aceite, 250 gr. de queso fresco

Preparación

Mezclar todos los ingredientes exceptuando el queso. Colocar una capa de ésta mezcla en una fuente y por encima unas tajadas de queso. Repetir hasta terminar con una capa de queso. Cocinar en horno medio por 30´/ 45´.

María de la Cruz Rojo

Fuentes

miércoles, 18 de febrero de 2015

Arvejas y tomates con bolitas de queso


Un poco de cocina védica, que, a pesar de omitir ciertos picantes por cuestiones filosóficas, tiene una combinación de especias igualmente sabrosa y - al igual que las comidas típicas de las distintas regiones de la India- se sirve de ellas para una mejor digestión, punto que no es menor cuando los platos llevan combinaciones difíciles para nuestros jugos gástricos, como en éste caso: un cuajo como la ricotta y crema de leche  en combinación con tomate cocinado y arvejas, éstas últimas son (dentro del grupo de las legumbres) fuente de proteínas, hierro y vitamina B y reaccionan sinérgicamente con otros alimentos ricos en proteínas como los cereales, las nueces y los productos lácteos. Lácteos y arvejas es justamente la combinación que proponemos hoy para lograr una mayor energía y vitalidad, y la utilización de especias nos va a ayudar a su mejor digestión.

A lo expuesto anteriormente debemos agregar que desde disciplinas como el Ayurveda o la herboristería, entendemos que no sólo podemos argüir cuestiones de sabor o digestivas, los condimentos y las hierbas también tienen propiedades medicinales. Puntualicemos en la receta de hoy: el jengibre es analgésico y mejora las funciones del hígado, el tomillo estimula la función biliar y en tisana puede ser utilizado como sedante y el laurel remueve los estancamientos en la sangre y el frío.
Resumiendo: un plato sabroso, digestivo y con propiedades medicinales.

Es una ecuación excelente, no se la pierdan:

Arvejas y tomates con bolitas de queso

Ingredientes

1/4 kg. de arvejas, 1/4 kg. de tomates, 500 gr. de ricotta, 6 cucharadas de aceite, 1 taza de crema de leche, 2 cucharaditas de morrón picado, 1 cucharadita de jengibre, 1 cucharada de tomillo, 4 hojas de laurel, 1 cucharadita de sal, aceite para freír.

Preparación

Colocar un poquito de fécula de maíz en las manos y  dos cucharadas en la  ricotta.  Trabajarla un poco; ir separando de  a poquitos e ir haciendo bolitas. Freírlas en aceite hasta que adquieran un color dorado. Reservarlas.

En un sartén colocar el aceite, calentar y agregar todas las especias. Dejar un par de minutos y luego agregar los tomates. Cuando los tomates se hayan reducido un poco, agregar las arvejas  la crema de leche y la sal. Bajar el fuego y cocinar hasta que las arvejas estén tiernas. Agregar las bolitas de ricotta  y seguir cocinando por 15 minutos más a fuego lento. Servir cuidando que no se desarmen las bolitas.


María de la Cruz Rojo

miércoles, 11 de febrero de 2015

Papas Crujientes con Sésamo



Dentro del conjunto de reglas generales a tener en cuenta para lograr una alimentación vegetariana equilibrada y saludable, las semillas representan (junto con las ensaladas y frutas crudas) un papel fundamental. En el caso de la receta de hoy, proponemos las semillas de sésamo, puerilmente famosas por ir encima de los panes de hamburguesas. Sin embargo, son, como alimento, mucho más que un apéndice decorativo. Su consumo en nuestra dieta tiene un aporte importante de proteínas,  calcio, ácidos grasos Omega 6 y 9,  lecitina, vitaminas B1, B2, B3, B5, B6 y E. Previenen enfermedades como la arteriosclerosis y osteoporosis, son antioxidantes y ayudan al tracto intestinal por su contenido en fibras. Contienen hierro (por lo cual son indicadas en caso de anemia), fósforo, potasio, magnesio, yodo, selenio y cromo. Son de gran ayuda para los trastornos del sistema nervioso y circulatorio. Su consumo se aconseja a los estudiantes pues estimulan la concentración y la memoria (por su contenido en fósforo), son ligeramente laxantes y estimulan la producción de leche en la lactancia. Las encontramos en tres variedades: sésamo blanco, marrón y negro. Nuestra receta de hoy utiliza semillas de sésamo blanco, se trata de una receta antidepresión, como todo lo que sea crujiente dentro de nuestra boca: al crujiente natural del sésamo (momento en el que despide su sabor particular y exquisito) se le suma el crocante de la papa. Porsupuesto se vuelve necesario acompañar éste plato con una abundante ensalada de verduras crudas, logrando así una combinación balanceada.

Papas Crujientes con Sésamo

Ingredientes

8 papas medianas, 60 gr. de manteca, semillas de sésamo (cantidad necesaria), aceite de oliva, 1 cucharadita de orégano, 1 cucharadita de nuez moscada, 1 cucharadita de sal.

Preparación

Lavar y pelar las papas. Cortarlas en rodajas de grosor medio.

Utilizar la manteca a temperatura ambiente. Agregarle las semillas de sésamo, la sal, el orégano y la nuez moscada. Mezclar hasta integrar y que quede una "manteca saborizada".

Untar las papas con ésta manteca, colocarlas en una fuente para horno y rociarlas ligeramente con el aceite de oliva. Cocinar a temperatura media en un horno precalentado (180°) hasta que la superficie esté dorada.

María de la Cruz Rojo

Fuentes


miércoles, 4 de febrero de 2015

Curry de Zuccinis, Cebollas y Morrones




… o cómo preparar algo sencillo, nutritivo y rápido, apelando a los auxilios que nos brinda la industrialización. Ésta receta constituye una de las excepciones en mi cocina: echar mano de un masala ya elaborado. No hay nada como la magia de preparar el propio curry o masala. Sin embargo, en aquellas situaciones en dónde el tiempo de preparado y maceración es inexistente, si tienen algo de una buena marca a mano, puede ejercer de auxiliar, como es el caso de éste receta. Otro aspecto no menos importante es la optimización de tiempo que tenemos ya que utilizamos los entretiempos de cocción para elaborar el resto del plato. En definitiva, un resumen de los motivos por los cuales sugerimos hoy éste curry:

Curry de Zuccinis, Cebollas y Morrones

Ingredientes
3 zuccinis medianos, 2 cebollas grandes, 2 morrones rojos medianos, 1 cucharadita de curry, 3 hojitas de laurel, 1 cucharadita de cúrcuma, 1 cucharadita de tandoori masala, 200 gr. de porotos rojos remojados en la víspera, 3 berenjenas, sal y orégano, ají molido.

Preparación

Poner a hervir los porotos en una cacerolita con agua y sal. Como es lo que más tiempo de cocción lleva, mientras aguardamos a que estén listos procedemos con la preparación del plato y del resto de la guarnición.

Para el plato principal:
Cortar los morrones en pedacitos, pelar y picar las cebollas. Rehogar todo junto con el laurel, una cucharadita de orégano y un poquito de sal y esperar hasta que los morrones estén cocinados. Mientras tanto, picar los zuccinis (si se prefiere, para que queden más suaves, se pueden pelar). Una vez que los morrones están listos, incorporar los zuccinis y cocinar entre cinco a diez minutos más o hasta que estén tiernos. Incorporar entonces la cúrcuma, el tandoori masala, mezclar y dejar descansar hasta terminar con las guarniciones.

Para las guarniciones:
Mientras los porotos y el primer rehogado están en cocción, cortar las berenjenas en rodajas y colocarlas en una asadera aceitada. Llevarlas a horno fuerte por 15´. Dar vuelta, rociar con orégano y sal gruesa o entrefina y llevar a horno unos 10 minutos más. Reservar.
Colar los porotos cuando están listos, en mi receta original los servía con un poco de aceite de oliva, pero en ésta ocasión, teníamos un remanente del salteado de cebollas que Richard prepara para sus fugazzetas, así que mezclé lo que quedaba con los porotos y solo o en la combinación, quedaron sabrosísimos.
Preparar el plato dividiéndolo en tres para colocar una buena porción de nuestro curry ya macerado mientras aguardábamos la cocción total de los porotos (uf!), un poco de estos últimos y unas rodajitas de berenjenas.
Voilá!


María de la Cruz Rojo